Todos nos hemos encontrado en la situación de querer negarnos a hacer algo pero no sabemos cómo decirlo; saber decir que no es un arte y es uno de los rasgos que caracterizan a las personas asertivas. Esto les permite liberarse de situaciones innecesarias o incómodas con mayor facilidad.
Parece difícil de creer que una palabra tan corta como “NO” sea tan complicada de pronunciar.
Aprender a decir no requiere de una practica constante, que se nos complica porque que quien te pide un favor espera algo de ti y no siempre estamos dispuestos a “defraudar” a los demás. El problema es que a mediano o largo plazo nos haremos menos hábiles en los conflictos, por lo tanto sentiremos más miedo o ansiedad a la hora de discutir y es probable que nuestro estado de animo decaiga.
Aunque a veces sea más fácil decir que sí, a la larga esto generará que nos sintamos mal con nosotros mismos, por no saber defender nuestra postura y terminar haciendo cosas que no deseamos hacer.
Te compartimos algunas frases que la psicóloga en terapia conductual Marcela Girón nos recomienda:
- «Agradezco mucho tu propuesta, pero en este momento no puedo comprometerme»
- «No puedo aceptar tu oferta en este momento, pero te agradezco sinceramente»
- «Lamentablemente no puedo participar, pero espero que tengas éxito en tu proyecto»
- «No puedo ayudarte ahora mismo, pero deseo que encuentres a alguien que pueda hacerlo»
- «Aprecio mucho tu amabilidad, pero tengo que rechazar tu solicitud por esta ocasión»
- «No puedo hacerlo, pero deseo que encuentres una solución»
- «En este momento no puedo aceptar, pero gracias por pensar en mí»
- «Me gustaría poder ayudarte, pero no tengo los recursos necesarios para hacerlo en este momento»
- «Siento mucho tener que decir no, pero necesito cuidar de mis propias prioridades»
- «Me gustaría poder ayudarte, pero tengo otros compromisos que debo cumplir primero»
- «En este momento no me es posible asistir, gracias»
Algunos consejos que debes seguir
1Solo di “NO”
La mejor manera de aprender a decir no es diciéndolo cuando lo sientas. Lo más probable es que termines sonando menos agresivo de lo que te esperas y, poco a poco, los demás lo verán como algo muy normal.
2Tomate tu tiempo
Antes de acelerarte y aceptar hacer cualquier favor que te hayan pedido, toma algunos minutos, o días, para pensar si deseas hacerlo o no. No necesitas comprometerte a nada, solo a analizar si te es posible hacerlo o no.
3Elimina pretextos
Cuando dices no a algo que te han pedido puedes caer en el error de dar muchas excusas y disculpas. La recomendación es que dejes de hacerlo y que te muestres firme. Cuando empiezas a buscar una forma de justificarte, los demás ven cierta debilidad y pueden aprovecharse de ello para obtener un sí. De vez en cuando no es malo ser egoísta y concentrarte en hacer aquello que quieres y nada más.