¿Tienes intención de aplicar a tu casa las palabras de San Francisco sobre el desprendimiento? Aquí van algunas ideas para que renueves tu hogar sin gastar dinero.
No importa si no tienes presupuesto: lo importante es saber distinguir entre lo necesario y lo superfluo. Y estar dispuesto a suprimir de nuestro entorno lo que está de más. Eso supone un reto porque de algún modo desnudamos el alma y nos quedamos sin ciertas «seguridades» del futuro. Una casa minimal no es compatible con el concepto de «por si acaso» que nos hace acumular y acumular.
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Los colores claros, la luz natural, la ausencia de todo objeto sobrante harán que ganemos en superficie. Todo parecerá más grande y más habitable.
No olvides además que el orden es reflejo del alma en paz y a la vez aporta tranquilidad y sosiego al espíritu si podemos disfrutar de él a nuestro alrededor.
Mira estas sugerencias:
