En vísperas del día en que la Iglesia celebra a la patrona de Brasil, los devotos tuvieron un regalo: se inauguró la primera fase del monumento gigante en honor de Nuestra Señora de Aparecida, en la ciudad de Aparecida, São Paulo.
La escultura es de acero, pesa 400 toneladas y mide 50 metros de altura. Este tamaño sitúa al monumento en la lista de las mayores imágenes religiosas de Brasil y del mundo.
La estatua costó unos 10 millones de reales y está situada en el barrio de Itaguaçu, a 3 km del Santuario Nacional de Aparecida. Sin duda se convertirá en otra atracción turística de la ciudad, que recibe millones de visitantes cada año.
El monumento fue diseñado por el escultor Gilmar Pinna, pero aún no está terminado. “Todavía vamos a colocar un mapa gigante de Brasil, sostenido por dos brazos de Dios. Cada brazo tendrá 19 metros de largo y la escultura medirá 50 metros en total, además de pesar 60 toneladas”, explica el escultor. Se espera que las obras de esta segunda fase del proyecto duren un año más.