El papa emérito Benedicto XVI se encuentra en estado grave de salud, pero está consciente y responde al tratamiento médico. El papa Ratzinger ha pasado la noche bajo control médico y el chequeo de sus condiciones físicas continuará en las próximas horas. El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni ha actualizado la información de ayer sobre las condiciones de salud del pontífice emérito, 95 años de edad.
«El Papa emérito consiguió descansar bien anoche, está absolutamente lúcido y alerta y hoy, aunque su estado sigue siendo grave, la situación en este momento es estable. El Papa Francisco renueva su invitación a rezar por él y a acompañarle en estas horas difíciles.»
Salud del Papa emérito
La última foto de Benedicto XVI es un retrato con los teólogos ganadores del premio Ratzinger 2022 (01.12.2022). Hasta ese momento, todo parecía normal dada su edad avanzada y sus problemas controlados al corazón.
El Papa emérito ya había perdido el uso de un ojo, la voz era débil y ya no estaba de pie.
La noticia de ayer del Papa Francisco de que su predecesor se estaba acercando a la muerte ha conmocionado al mundo católico e internacional.
Algunas voces curiales hablan de cuestión de horas o de días para que llegue la noticia fatídica. Antes de Navidad, el Papa habría sufrido un fuerte resfriado que después atacó a los pulmones.
El secretario privado, el arzobispo Georg Gänswein, que se encontraba en Baviera donde pasaría la navidad, ha regresado el miércoles dada la condición crítica de papa Ratzinger.