¡Viva Jesús! ¡Tus heridas son mis méritos!
Nombra tu petición para esta novena y luego considera la siguiente reflexión de san Pío:
Pasé una noche terrible, anteanoche. Esos cosacos [el apodo del santo para Satán] no hacían más que pegarme continuamente desde cerca de las 10, cuando me acostaba, hasta las 5 de la mañana. Me pusieron muchas sugerencias diabólicas: pensamientos de desesperación, de falta de confianza en Dios. Pero ¡viva Jesús! Me protegí diciéndole una y otra vez a Jesús: ‘vulnera tua, merita mea‘ [tus heridas son mis méritos].
Palabras que iluminan, Padre Pío